-- publicidad --

Al contrario de lo que mucha gente suele pensar, los logros en el currículum son muy valorados por la mayoría de reclutadores. Contar con años de experiencia es vital, pero demostrar que a lo largo de nuestra formación hemos obtenido buenos resultados, e incluso algunos premios, puede transmitir una imagen muy positiva de nosotros mismos. No obstante, la forma de poner los méritos académicos en el currículum también es determinante. Hacerlo de manera incorrecta puede ser contraproducente y resultar demasiado pretencioso. Será necesario, por tanto, encontrar el equilibrio: saber exactamente qué poner y qué no, y cómo hacerlo. Te lo contamos todo, a continuación.

Los premios y reconocimientos en el Curriculum Vitae

En primer lugar, encontramos los premios o reconocimientos que hemos obtenido a lo largo de nuestra trayectoria profesional. Por ejemplo, si se te concedió una beca por buenos resultados académicos, es conveniente ponerlo en esta misma sección, la que muestra tu título académico. No te extiendas demasiado, simplemente deja claro que obtuviste dicha beca.

También puede suceder que a lo largo de nuestra formación académica hayamos participado en algún concurso, resultando ganadores, y esto también es positivo incluirlo. No obstante, ten en cuenta que dichos premios deben ser recientes (no deben haber pasado más de tres años desde su obtención) y preferiblemente relacionados con tu área de especialización laboral.

¿Debo poner la Matrícula de Honor en el currículum?

Este punto es muy importante, ya que muchas personas tienden a incluir en su currículum la nota media con la que se graduaron o las calificaciones más altas de algunas asignaturas. Esto, sin duda, no es conveniente.

Solo resultará útil para las empresas conocer tus resultados académicos si estos son excelentes, por lo que es recomendable incluir la calificación solo en caso de que se trate de una Matrícula de Honor, y si la asignatura está relacionada con tu profesión, mucho mejor.

Publicidad