Viajar no solo te permite disfrutar de tu tiempo libre, conocer nuevas culturas, interactuar con gente nueva e interesante y probar la gastronomía del lugar. También es muy útil para encontrar empleo. ¿No te lo crees? Las personas que viajan desarrollan una serie de habilidades personales que no suelen entrenarse en el día a día, ni siquiera en un puesto de trabajo. Además, se considera que una persona viajera tiene una mentalidad abierta y defiende una serie de principios muy valorados por algunos reclutadores. ¿Todavía no sabes por qué deberías incluir los viajes que has realizado en tu currículum? Presta especial atención.
Tanto es así, que un estudio realizado por la compañía Hostelword, que entrevistó a empresarios y viajeros de ocho países del mundo, demostró que más del 80 % de las empresas valoran positivamente que el candidato haya viajado en varias ocasiones fuera de su país. Plasmar tu experiencia internacional en el currículum resulta una baza de lo más diferenciadora. Te explicamos por qué, a continuación.
Las aptitudes propias de un viajero que te ayudarán a encontrar empleo
En primer lugar, es innegable que alguien que viaja se enriquece culturalmente. Conoce la historia y las costumbres del lugar en el que se encuentra, además de practicar un idioma diferente si el destino es extranjero.
Este hecho, precisamente, hace que el viajero empedernido tenga una mentalidad mucho más abierta: se ha dado cuenta de que la suya no es la única realidad. Por tanto, su nivel de tolerancia y aceptación hacia lo diferente suele ser mucho más alto.
Por otro lado, y sobre todo si se viaja solo, el hecho se convierte en una muestra de confianza en uno mismo. A lo largo del viaje seguro que te has encontrado con inconvenientes que habrás tenido que solucionar de forma ágil. La habilidad para la resolución de problemas y la capacidad de adaptación a las situaciones difíciles, por tanto, también se aprenden en los viajes.
También se sobrentiende que una persona que ha viajado mucho está acostumbrada a la toma de decisiones importantes y rápidas, con el valor que esto adquiere si hablamos de optar a un puesto de responsabilidad en una empresa, en el que las habilidades duras de un profesional son tan sumamente importantes. Del mismo modo, la capacidad organizativa que requiere realizar un viaje también será muy útil en el desarrollo de cualquier actividad laboral.
El trabajo en equipo suele ser un elemento común en cualquier viaje. Si viajas acompañado, tendrás que consensuar, negociar qué actividades o lugares visitar cada día y llegar a acuerdos. A su vez, es posible que duermas en habitaciones compartidas o que formes parte de grupos turísticos, lo que sin duda te ayudará a compartir tus puntos de vista y a aceptar los de otras personas.
Y si viajas solo, mucho mejor, porque en este caso estarás demostrando que eres completamente independiente y que no te asusta afrontar situaciones en solitario.
¿Dónde incluir los viajes en el currículum?
Ya sabemos que es muy conveniente incluir los viajes que has hecho en el currículum. Pero, exactamente ¿en qué parte de la estructura de tu currículum hay que ponerlos?
Antes de nada, hazte una pregunta: ¿esos viajes han tenido el objetivo de estudiar, de aprender un idioma o de hacer prácticas profesionales en el extranjero? Si la respuesta es sí, no lo dudes e inclúyelos en el apartado de formación académica. Tampoco estaría de más mencionarlos en el extracto, si tu currículum cuenta con este apartado.
Si has viajado a otros países por ocio o para desarrollar acciones de voluntariado, el mejor lugar para incluirlos será en la sección de aficiones e intereses. Y si los has hecho por motivos laborales, mientras estabas trabajando en una empresa, entonces ponlos en el lugar en el que detallas esta experiencia profesional.
Por último, te recomendamos que, si te encanta viajar, haces buenas fotos y escribes bien, te plantees escribir un blog de viajes. Además de divertirte haciéndolo, podrás vincularlo a tu currículum y demostrar así tu pasión por descubrir mundo.