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Tanto si acabas de finalizar tu formación académica como si recientemente te has quedado sin trabajo, darte de alta como demandante de empleo puede reportarte muchas ventajas. En primer lugar, porque son muchas las empresas que recurren, además de a otras vías, a las oficinas de empleo para encontrar entre sus inscritos al candidato más idóneo para el puesto de trabajo que quieren cubrir.

En este sentido, si te inscribes como demandante de empleo, recibirás de forma periódica diferentes ofertas de trabajo relacionadas con tu formación o con las características que hayas especificado en el momento de la inscripción. Pero, además, estar inscrito te permite también el acceso a una serie de prestaciones y subvenciones (en caso de que reúnas los requisitos para recibirlas), a cursos de formación y a sesiones de orientación laboral.

¿Cómo puedo darme de alta como demandante de empleo?

Si estás en una de estas situaciones y deseas obtener la tarjeta de demanda de empleo (conocida como DARDE, que significa ‘Documento de Alta y Renovación de la Demanda de Empleo’), el procedimiento es bastante sencillo.

Lo primero que tendrás que hacer es asegurarte de que cumples con los requisitos exigidos para poder inscribirte. Lo más seguro es que así sea, porque cualquier ciudadano mayor de 16 años, que no esté imposibilitado para trabajar y que sea español, ciudadano de algún país miembro de la Unión Europea o ciudadano de cualquier otro país con acceso al mercado de trabajo de España, podrá darse de alta como demandante de empleo en cualquiera de las oficinas de empleo que hay repartidas por todo el país.

Así, solo tendrás que localizar las oficinas del Servicio Público de Empleo de tu comunidad autónoma o, si vives en Ceuta o Melilla, acudir a las dependencias del Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE). Lo más frecuente es que ambos organismos estén en el mismo lugar físico, pero lo mejor es que compruebes su localización antes de acudir a inscribirte como demandante de empleo.

También deberás informarte acerca de si es necesario, en el caso de tu comunidad autónoma, solicitar cita previa o no para apuntarte al paro. En muchos casos será necesario que te adjudiquen un día y una hora, pero en otros bastará con que acudas directamente a las oficinas en el momento que quieras. No olvides tampoco comprobar si en tus oficinas de empleo se admite la inscripción como demandante de empleo a través de Internet, pues ello te permitirá agilizar mucho la gestión.

Lo que sí deberás tender en cuenta en cualquier caso es la documentación necesaria para realizar este trámite, que incluye también en una breve entrevista gracias a la cual el empleado del servicio público de empleo elaborará tu perfil profesional. Así, no olvides llevar tu DNI, la cartilla de la Seguridad Social y todos los justificantes o títulos académicos que acrediten tu formación. Los permisos de conducir y los certificados de empresa de las organizaciones en las que hayas trabajado también serán de utilidad. Y, si eres extranjero, deberás aportar el NIE en lugar del DNI, y la cartilla de la Seguridad Social solo si has trabajado antes en España.

Una vez finalizada la entrevista, ya te habrás inscrito como demandante de empleo y podrás solicitar la prestación correspondiente, acceder a diferentes ofertas de trabajo o ser informado de las actividades formativas que se lleven a cabo desde los servicios públicos de empleo. Eso sí, recuerda que la demanda de empleo debe renovarse, si quieres seguir disfrutando de todas sus ventajas. Revisa el documento que te habrán dado en el momento de inscribirte y apunta la fecha en la que deberás ‘sellar el paro‘.

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